02 julio, 2014

Wildcoast y el porque es Wild




La Wildcoast, es la zona sureste de Sudáfrica, en ella nació Mandela, y es la zona Zulú del país.
Vecina de la aldea.
El ser Zulú se identifica con guerreros, y Mandela lo fue, apoyaba la fuerza y la violencia en su época de juventud, incluso hizo algún viaje al norte de África para que los militares de otros países les entrenaran en tácticas. Luego le metieron en la cárcel, y salió pensando que lo de la venganza no lleva a ningún sitio, y

menos mal, porque si hubiera querido se hubiera armado una buena gobernando los negros, y pudiendo tomar revancha contra los blancos.
Ahora todo está tranquilo, aunque la Wildcoast, por más que los dueños de los hostels se empeñen, da un poco de cosa estar en las ciudades grandes. Mthatha tuve que esperar en el coche un rato y no se por qué no me sentía del todo relajado, igual es más lo que me dijeron antes de ir, incluso que no llevara reloj, porque si un blanco lo lleva seguro que es valioso (dicho por un chico negro).


Típica vivienda circular y de color vivo.


En los pueblos pequeños la gente es adorable, encantadores, con casas llenas de color sobre una alfombra de césped y un fondo de mar azul. De las mejores fotos que se pueden tomar en todo el país, que dinamismo.
El hostel, por encima de Coffee bay, a unos 20km al norte, está llevado por un sudafricano y su mujer de
Suiza, el chico es el hermano de quien lleva el Wild Spirit que estuve unos días antes, pero aquí no hay abuelo.
Todo es rustico, pero la habitación merecía la pena, con ventana a un acantilado impresionante. La comida riquísima, y hacen su propio pan. La verdad es que hay muy buen ambiente.
Con Michael y su bici

Lo que se puede hacer aquí es pasear por las praderas, ir en bici a lo loco como hacía un alemán con el que coincidí, alquilaba un coche, y en cada sitio que iba se quedaba 3 ó 4 días para recorrer los alrededores con la bici, y de nuevo a meter la bici en el coche y a otro sitio.

Nosotros fuimos a ver un arco, tuvimos que cruzar un río nadando, y a la vuelta descubrimos que había un puente río arriba. Incluso un niño estuvo atento varias veces para guiarnos, aparecía justo cuando no sabíamos por donde tirar y nada más decírnoslo, desaparecía. Y al rato volvía a aparecer cuando había otro cruce de camino, muy majo el chico, y lo hacía de corazón.

Los niños majos de verdad.


Una zona muy recomendable, autentica, de momento. Me dijeron que Coffee Bay está ya muy explotado, pero esta zona está aun virgen como Santa Teresa de Jesús.




Arando elegantemente
La cena en familia :)

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